Viajar por la Patagonia argentina es enfrentarse a uno de los últimos territorios verdaderamente salvajes del planeta. Allí, los caminos serpentean entre glaciares milenarios, lagos turquesa y extensas estepas azotadas por el viento. No es una tierra para cualquiera, y mucho menos para cualquier vehículo.
Se necesita un SUV con alma aventurera, capaz de dominar ripios, vientos cruzados y cambios de clima repentinos sin perder estabilidad ni confort. Estos modelos están hechos precisamente para eso: recorrer sin límites un paisaje que parece el fin del mundo, pero que en realidad es el comienzo de la libertad.
1. Toyota Land Cruiser 300
Este gigante del off-road es casi sinónimo de “viaje extremo” en zonas remotas. Su robusto chasis, excelente despeje y reputación de fiabilidad lo hacen idóneo para la Patagonia.
Los usuarios que lo utilizan en rutas difíciles destacan que «se siente como cheat code para caminos de ripio». Para un trayecto donde puede faltar señal, hay ríos, piedras y viento polar, el Land Cruiser 300 es un aliado.
Puntos clave: alta capacidad todoterreno, gran autonomía, respaldo de marca global.
2. Land Rover Defender 110
Un clásico renovado, preparado para la aventura. Según especificaciones oficiales, el modelo puede alcanzar un despeje máximo de hasta ~293 mm y ángulos de ataque/de salida que lo sitúan entre los más capaces del mercado.
Su sistema de tracción, vadeo profundo y tecnología de asistencia lo hacen perfecto para cruzar terrenos patagónicos difíciles.
Puntos clave: diseño aventurero, tecnología de apoyo off-road, estética robusta.
3. Toyota Hilux GR Sport
Aunque técnicamente es una pick-up, su uso como plataforma SUV para expedición la convierte en una alternativa muy válida.
En la Argentina se destaca su nueva suspensión de alto rendimiento, aumento de despeje y calibrada para caminos de tierra. En la Patagonia, donde a veces se necesitan vehículos con doble función (transporte y remolque, por ejemplo), la Hilux gana puntos.
Puntos clave: robustez legendaria, buen servicio posventa en Argentina, excelente para terrenos difíciles.
4. Toyota Fortuner/SW4
Esta SUV, muy presente en el mercado argentino como SW4, es una opción más “compacta” pero aún apta para ripio y excursiones extendidas. Ya se ensambla en Argentina y cuenta con versiones 4×4. Para quienes buscan un equilibrio entre ciudad y rutas complicadas en Patagonia, puede ser ideal.
Puntos clave: mayor maniobrabilidad, buena red de servicio en Argentina, adecuado para expediciones moderadas.
5. Subaru Forester Wilderness
Aunque no siempre aparece entre los “grandes” del off-road, es una alternativa interesante para zonas de la Patagonia donde los caminos están menos deteriorados y se busca confort además de capacidad. En foros de viajeros se menciona que “la suspensión y despeje” son factores clave cuando se sale del camino asfaltado.
Puntos clave: buena para rutas mixtas (asfalto + ripio), menor tamaño = mejor para pistas estrechas, confort.
6. Mercedes‑Benz G‑Class (Clase G)
Aunque de mayor lujo que utilitario puro, la versión Clase G tiene capacidad todoterreno de alto nivel y puede usarse para expediciones donde el presupuesto lo permita. Su herencia militar y estructura robusta le dan ventaja en entornos extremos.
Puntos clave: lujo + capacidad, ideal para quienes quieren explorar sin sacrificar comodidad, buena para rutas largas en Patagonia.
Yuniet Blanco
